Son muy sencillos pero necesarios de conocer para hacerlo correctamente y ayudar a que nuestras plantas suculentas crezcan fuertes.
Las plantas suculentas son capaces de absorber la humedad del ambiente y retenerla en sus hojas, tallos y raíces. Precisamente por eso, el exceso de riego puede ser letal para ellas.
Durante los meses de frío, no necesitarán más de un riego cada quince días mientras que en los meses de calor podemos aumentar la pauta a un riego por semana.
Aunque necesitan mucha luz, nunca someteremos a las suculentas al sol directo. Sobre todo, porque para poder mantener una correcta hidratación necesitan poder guardar las reservas de agua y la exposición directa al sol las deshidrata.
Este factor puede hacer que las hojas se tornen rojas y eso es un signo de que se están quemando. Si detectamos que la tonalidad de sus hojas palidece, es momento de buscarle una ubicación donde pueda recibir más luz.
Que guarden bien el agua no significa que lleven bien estar húmedas. Por eso mismo, es importante que las plantas suculentas tengan un buen drenaje que permita eliminar el exceso de agua.
Tengamos en cuenta que crecen sobre roca, corteza de árbol y hasta en condiciones poco favorables. Por eso mismo, no necesitan un sustrato rico en minerales sino, más bien, un suelo pobre.
Nayón, Mariano Cruz Tipán y Quisquis